Guía rápida de tallas

Subo un post súper rápido para poner esta imagen a modo de guía rápida de tallas. Aunque ya traté este tema, veo que sigue habiendo mucha confusión al respecto y creo que este dibujo facilita la comprensión. Circula por internet en inglés y alguien en Facebook me sugirió traducirla al español, así que aquí está. La autora original es Katie Lisko (redditor /u/ErrantWhimsy).

guiatallas-net

Como ya expliqué más exhaustivamente en el post sobre cómo funcionan las tallas, la talla de la copa es relativa a la talla del contorno. La mayoría de la gente entiende que el número se refiere al contorno y la letra a la copa, y que a mayor pecho, mayor letra. Pero mucha gente se sorprende al saber que no todas las copas D (ni ninguna otra letra) son iguales. Partimos de un determinado contorno y según sea la diferencia entre este y el volumen del pecho, ponemos la letra o talla de copa, comenzando con la A, tal y como vemos en la tercera fila del dibujo. Así que una chica con una 90A y una con una 90D, tienen el mismo contorno pero la segunda tiene el pecho más grande que la primera. Cuando cambiamos a un contorno diferente, volvemos a empezar con la A para la chica con el menor volumen de pecho en relación a su contorno y por lo tanto la copa D (o cualquier otra) para este contorno sería diferente a la copa D de otro contorno, tal y como vemos en la segunda fila del dibujo: la relación entre copa y contorno en todos los casos es la misma y por eso tienen la misma letra, pero el volumen total del pecho no es el mismo. Para buscar el mismo volumen de pecho en un contorno diferente, tenemos que utilizar el sistema de tallas hermanas que nos muestras la primera fila del dibujo.

¿Cómo funcionan las tallas de sujetador? Equivalencias entre tallas

¡Hola de nuevo!

Voy a continuar con el Capítulo 2 de Cómo Funcionan Las Tallas y explicar lo que dejé pendiente en el otro post: Las equivalencias entre tallas, o mejor dicho entre copas.

Para ello, lo siento pero tenemos que volver a recordar mi cutre-dibujo (que ha tenido mucho éxito jajaja).

Habíamos dejado claro en el post anterior que estas dos personas no coinciden en la talla de la copa ni del contorno. Pero al tener el mismo volumen de pecho, el sujetador que cada una use le quedará bien a la otra en lo que es la copa. Existe una equivalencia entre tallas en cuanto al volumen, lo que los anglosajones llaman “sister sizes” o sea, tallas hermanas. Las dos amigas del dibujo usan dos tallas que son hermanas pues que sus tetas son igual de grandes. (La palabra “teta” parece que me suena un poco basta para ponerla por escrito, pero es que ¡es que lo son al fin y al cabo! ¿Qué opináis? Jaja).

Cada talla de sujetador es equivalente o hermana de la talla con un contorno menor y una copa mayor o viceversa. Suena un poco trabalenguas, pero con un ejemplo creo que se entiende mejor. En el post anterior había dicho que las chicas del dibujito podrían llevar una 85D y una 95B respectivamente, y es que estas tallas son equivalentes. 85D = 90C = 95B. Estas tres tallas tendrían un volumen igual, es decir, lo que sería el aro y la tela que recubre el pecho serían exactamente iguales y lo único que cambiaría sería la longitud de la banda. Por eso que decíamos de que las letras de las copas son en relación al contorno. Si yo tengo un contorno de espalda de 85 y un contorno de pecho de 85+4, mi talla será la 85D. Una persona con un contorno de 90 tendría una talla más de contorno que yo y con el mismo volumen de pecho, su contorno de pecho entonces sería 90+3, o sea, una 90C. Otra persona con un contorno de espalda de 95 y el mismo volumen, tiene un contorno de pecho de 95+2, o sea, mismo volumen absoluto pero una talla más pequeño en relación con su pecho, por tanto una 95B. Los números que estoy utilizando no son reales, las medidas de una 85D no son 85 y 89, pero las uso para que se pueda entender mejor. En otra ocasión más adelante hablaremos de las medidas de cada talla.

He dibujado esta tabla en la que se ven las equivalencias entre tallas. Todas las tallas del mismo color son equivalentes en volumen.

He parado en la copa K y en el contorno 115, pero existen más como ya dije muchas veces. De todas formas, esto os puede servir para haceros una idea del montonazo de tallas que existen. Si nos vamos a un Oysho nos ofrecen 5 tallas: Copas B desde la 80 hasta la 100 (creo que ahora han empezado también a ofrecer la copa C, así que serían 10 tallas). Si nos vamos a un Womens Secret creo que nos ofrecen 22 de algunos modelos (hasta la copa D en algunas tallas). Pero en realidad existen muchas más de 100. Y las mujeres que usamos alguna de esas tallas “raras” no somos bichos ni estamos desproporcionadas con un pecho monstruoso, ni nada que se le parezca. Y cuanto más pecho tengamos, más deberíamos preocuparnos de llevar la talla correcta.

Bueno, ¡a lo que estábamos! Que me desvío de tema. Como decía, todas las tallas que se ven del mismo color en el gráfico, llevan el mismo volumen de pecho pero con diferente banda. Esto nos sirve para saber cómo movernos por el tallaje cuando un sujetador nos queda grande o pequeño por algún sitio.

Si te pruebas un sujetador y te queda bien en lo que es el contorno, pero la copa te queda grande o pequeña, es muy fácil. Simplemente tienes que coger esa misma talla de contorno e ir subiendo o bajando copa hasta que encuentres la que te quede bien.

Pero si te lo pruebas y te queda bien en las copas, pero mal en el contorno, entonces tienes que buscar la talla equivalente. Si te recoge bien el pecho pero la banda se te sube, deberás probar con una talla menos de contorno y entonces subir una copa para que el tamaño de lo que te recubre la teta sigan siendo el mismo. Si te aprieta demasiado harás lo contrario, subir una talla de banda y bajarla de copa.

Hay que puntualizar que el que las tallas sean equivalentes no quiere decir que te sirvan todas ellas. Solamente una será la tuya, pero dependiendo de marcas y modelos tendremos que ir subiendo y bajando de un lado y otro para encontrar la perfecta, porque por supuesto la ciencia del tallaje no es exacta.

Por esta razón muchas veces intentamos comprar un sujetador que nos quede bien y terminamos llevando una talla que es equivalente (o algo parecido) a lo que deberíamos llevar. Al no tener en la tienda la copa que necesitamos, nos intentan vender una equivalante que nos haga el apaño. En mi caso por ejemplo, muchas veces me han vendido una 100D. La talla que generalmente me está perfecta es la 85H. Si seguimos la tabla de volúmenes 85H=90G=95F=100E, así que en verdad me llevaba una talla que era en volumen, algo parecido a lo que necesitaba, una copa menos de la que realmente necesitaría (100D=85G). El problema es que aunque en volumen sea equivalente, en contorno no lo es y por tanto no me va a dar la sujección que necesito. Un sujetador de la 100E no me serviría de nada porque la banda se me subiría por la espalda y no me sujetaría el pecho, aunque mis dos tetas queden dentro de la tela.

Entiendo que tener más de 100 tallas en stock sería bastante costoso para la mayoría de las tiendas, pero al menos creo que es importante que nosotras mismas seamos conscientes de lo que necesitamos y no nos dejemos engañar con tallas equivalentes que no nos hacen la función necesaria y nos hacen sentir mal. Estoy cansada de oir a gente con el pecho grande decir que lleva “la 100” o “la 115” o “la 95D” como si fueran tallas enormes. La D no es una copa demasiado grande. Es la cuarta más grande (o más pequeña, según se mire) que hay. No nos dejemos engañar por las grandes cadenas que nos intentan meter en su ropa aunque no nos quede bien. Y la 115 tampoco es una talla grande. De hecho ya dejé claro que ni siquiera es una talla 🙂 Si es una 115B entonces es un pecho pequeñito. Si es una 115J, entonces sí podríamos decir que es grande.

Para terminar este post me gustaría poner una foto que creo que es muy interesante y que está sacada del blog de Butterfly Collection, una tienda canadiense especializada en tallas grandes y buenos fittings. Se trata de 5 sujetadores copa D de diferentes tallas de contorno, donde se ve claramente que ni la banda ni la copa son iguales, pero sí guardan una proporción entre ellos. Si pincháis en la foto os llevará a su post hablando de este mismo tema (en inglés, claro).

http://blog.butterflycollection.ca/2012/05/bra-school-not-all-d-cups-are-same-size.html

Espero haberme explicado bien. Me pongo a escribir y me doy cuenta de que es más difícil explicar las cosas de lo que pensaba 🙂 Si tenéis alguna duda, pregunta o comentario dejádmelo debajo y entre todas intentaremos ayudar. (Para comentar tenéis que ir al lado del título y pinchar en el pequeño bocadillo. Comentad aunque sea para saludar, que así no siento que esté hablado sola jajajaja).

¡Hasta la próxima entrada!

¿Cómo funcionan las tallas de sujetador? Contorno y Copa

¡Buenas a todas!

Vamos a entrar en materia con el tema de las tallas. Como hay bastantes cosas que explicar y yo soy de mucho enrollarme, voy a ir haciendo entregas por capítulos para que no se haga muy pesada la cosa 😀

¿Cómo funcionan las tallas de sujetador? Quienes ya lo sepáis, pensaréis que esta entrada es una chorrada. Pero lamentablemente hay muchísima gente que aún no sabe cómo funcionan. En serio, mucha, más de la que os imagináis.

Un grito al mundo: ¡La 90 no es una talla! Ni la 95, ni la 100. Eso es media talla, nada más.

La talla del sujetador se compone de un número y una letra. El número se refiere a lo que llamamos el contorno, y la letra se refiere a lo que llamamos la copa. El contorno viene dado por la medida de nuestro contorno (valga la redundancia) alrededor de la base del pecho, mientras que la copa se determina con la medida de nuestro contorno alrededor de la parte más amplia de nuestro pecho (generalmente a la altura de los pezones).

La medida 2 determina la talla del contorno.
La medida 1 determina la de la copa.

De forma que si me dices que llevas la 90, me puedo hacer una idea sobre cómo de ancha tienes la espalda, pero no sé nada acerca del tamaño de tu pecho. El problema es que las grandes cadenas de corsetería (y tristemente muchas pequeñas también) se empeñan en meter a toda la población en 5 tallas y solo venden la copa B. De forma que parece que lo “normal” fuera la copa B y el resto fueran cosas raras. Tanto es así, que cuando alguien nos dice que lleva “la 90” damos por hecho que se refiere a la 90B.

Las tallas de contorno, en España van de 5 en 5. Las que solemos encontrar más facilmente en las tiendas van desde la 80 hasta la 100. Por supuesto existen muchas más. Lo mismo con las copas. Las copas en España se representan con una sola letra, en orden alfabético. La A es la más pequeña, la B, como dije, es la que solemos ver en todas las tiendas. La copa C y la copa D también se pueden encontrar en muchos sitios. Y a partir de ahí es casi misión imposible, pero como dice la cabecera de este blog, también hay vida más allá de la copa D. Existen muchas más, tantas como os imaginéis, aunque cuanto más lejos en el alfabeto estén, más difíciles de encontrar, pero de esto ya hablaremos en otros posts.

Logicamente, cuanto mayor sea la medida del contorno, mayor será la talla que usamos. Pero en el caso de la copa, la talla aumenta cuanto mayor sea la medida respecto al contorno. Es decir, la talla de la copa es una medida relativa. No todas las copas B son del mismo tamaño ni todos los pechos de un determinado tamaño usan la misma letra de copa. Supongamos que cada una de mis tetas tiene el tamaño de una pelota de tenis, y que mi talla es la 90C. Otra persona que tenga el pecho del tamaño de dos pelotas de tenis no tiene por qué llevar mi misma talla. Si su espalda es mayor que la mía, por ejemplo una 100, llevará una copa menor que la D, porque su pecho en proporción al contorno es mucho menor que el mío. He hecho un dibujito para ilustrarlo. Como podéis ver, tengo nulas habilidades para el dibujo, y menos a ordenador 😀

En los dibujos, el volumen del pecho es exactamente el mismo, pero la constitución de cada uno de los ejemplos es distinto. Aunque el tamaño del pecho en términos absolutos es el mismo, en términos relativos el dibujo de la izquierda tiene más pecho que el de la derecha, ya que al ser más fina de contorno, proporcionalmente tiene más pecho que el dibujo de la derecha. Por eso, la persona de la izquierda llevará más copa que la persona de la derecha. También llevará un contorno menor puesto que su ancho de espalda es menor. Por poner un ejemplo, el dibujo de la izquierda podría llevar una 85D y el de la derecha una 95B. Y es que existe una equivalencia entre diferentes tallas en lo que se refiere al volumen, pero para no alargar este post, mejor hablamos de eso en el próximo 😀

Star In a Bra – Curvy Kate

Hoy voy a matar 2 pájaros de un tiro y presentaros la marca Curvy Kate y su concurso Star In a Bra.

Curvy Kate es una marca inglesa especializada en corsetería para tallas grandes. Llevan desde 2009 y fabrican sujetadores en tallas entre la 75 y 115, copas entre la D y la K (del tallaje inglés, que ya explicaré en otro post más adelante),  y braguitas entre la 34 y la 48.

Al ser una marca exclusiva de copas grandes se caracteriza porque sus diseños están especialmente pensados para nosotras. Según dicen ellos mismos, cada uno de los diseños está probado en sus modelos que se aseguran de que sienten a la perfección.

Sus diseños son muy monos, tiene cositas para todos los gustos, desde los más básicos hasta los más sexys. En concreto la colección Showgirl es la línea más glamourosa y sexy y  se compone de 3 conjuntos (en varios colores), el Tempt Me, el Tease Me y el Thrill Me para ayudarnos a conseguir escotes de vértigo.

Tease Me

La otra característica de Curvy Kate son sus modelos: Chicas normales, con sus curvas, sus imperfecciones y sin cuerpo retocados digitalmente. Intentan enseñar sus productos tal y como quedarían en mujeres normales, lo cual es de agradecer.

Para ello llevan 2009 organizando en Reino Unido el concurso Star In A Bra. El concurso es su “cantera” de modelos. Las chicas interesadas en participar tienen que enviar una serie de fotos en ropa interior y entre todas las candidatas la empresa preselecciona a 30. De esas 30, el público escoge a las 10 finalistas a través de una votación en Facebook. Las 10 tienen la oportunidad de participar en una sesión de fotos profesional posando con los conjuntos de Curvy Kate y una vez las fotos están listas, vuelven a pasar por Facebook para que nosotras elijamos a la ganadora.

En los últimos años han ampliado el concurso también a Estados Unidos y Australia y ahora mismo está proceso el concurso estadounidense. Las ganadoras del Star In A Bra se llevan (entre otras cosas) un contrato de un año con una agencia de modelos y por supuesto ser la imagen de la marca en sus fotos promocionales.

Hasta el jueves podéis votar para escoger a las 10 finalistas americanas a través del Facebook de Curvy Kate USA:

http://www.facebook.com/CurvyKateUSA/app_327229827331803

Os pongo una foto de algunas de las chicas que han ganado el concurso y de paso veis algunos de los conjuntos de la marca (en la foto de arriba tenéis a Lauren Colfer, ganadora en 2010)

Este año han sacado por primera vez la linea de bikinis, que de momento se compone nada más de 3 modelos.

Sophia Morgan acaba de ganar el concurso en UK. Lleva el bikini Rio Ruffle.

Personalmente de momento solo tengo un sujetador de esta marca, pero me gusta mucho, la calidad es muy buena así que tengo ganas de probar alguno más pronto. De sus clásicos me gustan mucho los Angel y los Portia, y de la nueva colección me tienta un montón este (me encanta el negro y el leopardo, es ideal para mi jaja):

Os animo a votar en el concurso de Estados Unidos, y como siempre, a comentar lo que os apetezca. ¿Qué os parece la marca? ¿La conocíais? ¿Os apuntaríais al concurso?

Mi pechistoria

La verdad es que no recuerdo exactamente a qué edad empecé a usar sujetador, pero sé que fue bastante más tarde que la mayoría de mis amigas. No era algo que me preocupara, pero no deja de ser un poco irónico que años atrás pareciera que me iba a quedar “plana” y al final haya ocurrido todo lo contrario.

Así que son ya muchos años con mi amigo el sujetador, calculo que unos 13. Y de esos 13, aproximadamente 10 ha sido mi prenda más odiada. Al principio me hizo mucha ilusión poder usarlo al fin, claro, pero conforme iba ganando talla, el odio iba aumentando. Hace un par de años me reconcilié con mis sujetadores gracias a un gran descubrimiento: MI TALLA.

Puede parecer una tontería muy grande, pero para mí conocer mi talla y empezar a usar sujetadores cómodos y que me sentaran bien fue toda una revelación. No voy a usar la típica frase de “me cambió la vida”, pero casi. Me pasé años pensando que mis tetas eran demasiado grandes para llevar sujetadores bonitos y que tenían una forma muy fea y amorfa que hacía que ningún sujetador me sentara bien y me resigné a pensar que la ropa nunca me iba a quedar como yo quería. Era uno de mis “defectos” y punto.

En todo ese tiempo de odio, me dejé aconsejar por diversas dependientas de corseterías, grandes almacenes, etc. Toda ilusa entraba a las tiendas preguntando por un sujetador “que recogiera” porque normalmente no me sujetaban nada. Ante esa demanda, siempre me sacaban los sujetadores más feos de la tienda. Al final una se acostumbra a todo. Llevarme a casa uno que fuera liso y negro era todo un triunfo. Y que me quedara medio bien era más triunfo todavía. Recuerdo una vez que encontré uno de marca Calvin Klein que me gustaba mucho: Liso y laso y me entraban las tetas dentro. Me lo compré en todos los colores que encontré, incluso me lo pidieron a otra tienda para conseguirlo en colores nuevos. Normalmente lo que ofrecían eran tallas 95 y 100  con copas C y D, así que suponía que mi talla era alguna dentro de ese rango.

Un día me acerqué al Corte Inglés de Gijón a buscar un suje nuevo. La chica que me atendió me preguntó qué talla llevaba y le dije “la 95D o la 100C, no lo sé”. Me miró y me dijo: “Imposible que lleves una 100. Pasa al probador y te voy sacando modelos”. Igual me probé unos 20 sujetadores. Diferentes tallas y diferentes modelos, hasta que esa mujer dio por fin con mi talla. Era la 90G. En mi vida había oído hablar de sujetadores con copa G. Me daba igual, estaba feliz porque me quedaba PERFECTO: me sujetaba, no se me movía por ningún lado, me levantaba el pecho y estaba comodísima. La parte mala fue mirar la etiqueta y ver que los modelos disponibles en esa talla costaban alrededor de los 80 euros.

Estaré eternamente agradecida a esa mujer. A partir de ahí, empecé a descubrir un mundo nuevo de corsetería: empecé a comprender cómo funcionan las tallas, cómo tiene que quedar un sujetador y por qué los que usaba hasta entonces no me iban bien, que hay muchísimas opciones de tallas grandes donde elegir a precios razonables y un montón de cosas más que intentaré contaros a todas poco a poco en este blog.

Ahora me he cambiado a la 85H, me va mejor. La última vez que estuve en Inglaterra aproveché para pasarme por Bravissimo, que tienen fama de hacer los mejores fittings del país y la conclusión fue la misma. Llevo una 85H o 90G, aunque últimamente debo haber engordado y veo que estoy más bien en una copa más.

¿Y tú? ¿Cuál es tu historia? ¿Sabes cuál es tu talla? ¡Deja tu comentario!